La bóveda en red de Joseph Ribes_02 Imprimir

Hipótesis de trazado

La volta ab dotsa claus que hemos estudiado se caracteriza por su simetría axial (Fig. 6): los nervios diagonales desaparecen y no hay clave central, la cúspide de la bóveda se cierra con una red de cuatro claves, a partir de la cual, se originan la retícula de los nervios. La traza en planta de la bóveda se inicia con un cuadrado que se determina con las cuatro claves centrales, equidistantes del centro (fig. 7), de las diagonales y las ligaduras que las conectan entre sí. Para determinar la geometría que define la posición de las otras claves, se procede trazando una línea que, pasando por dos claves contiguas, (clave 3 y W), se prolongue hasta cortar el borde del cuadrado (T) y, desde este punto, se traza otra línea perpendicular al mismo borde. La intersección de esta línea con la diagonal del cuadrado determina la posición de la clave de la diagonal (clave 1). Trazando desde esta clave una línea paralela al borde del cuadrado hasta encontrar la línea de prolongación de las claves centrales previamente trazada, se obtiene la posición de la clave próxima a la ligadura (clave 2). Para completar el dibujo de la retícula es ahora necesario añadir los nervios que conectan las dos claves que se acaban de definir (claves 1 y 2) con los puntos medios de los dos lados del cuadrado (claves 5 y 6), que serian la cúspide de los arcos formeros. Se obtiene entonces el dibujo de un cuarto de la bóveda que, por simetría, es suficiente para determinar el dibujo completo de la planta. Como acabamos de ver, la distancia de las cuatro claves centrales con el centro de la bóveda determina de manera univoca la posición de las otras claves; por tanto, al variar este parámetro las demás claves adoptan otra posición definida geométricamente por el método de traza, El diseño en planta de la bóveda está sujeto a una ley geométrica que define paramétricamente la posición de cada clave, de tal modo que, cualquier variación de una de ellas, conlleva el cambio de posición del resto (Fig. 7).

Como acabamos de exponer, las bóvedas en red, al contrario que las bóvedas estrelladas, carecen de clave central. Se construyen con una red de nervios que forman una retícula de geometría más o menos compleja. Este tipo de bóvedas alcanzan el máximo de su expresividad en las iglesias en planta de salón, es decir con las naves a la misma altura, ya que, el diseño de la red va conectando todos los tramos entre sí hasta extenderse a la totalidad del templo. En Alemania, este tipo de bóvedas se construían con un solo arco.

Sin embargo, por compleja que fuera la red, un sólo arco y por tanto una única dovela, permitía construir toda la bóveda. Conseguir construir toda la red con un solo arco, el arco principal, requería estar en posesión de ciertas habilidades geométricas; requería conocer un método típicamente germánico para el trazado de bóvedas, para determinar las alturas de las claves y para trazar de la curvatura de los arcos. Este método se conoce por el nombre: Prinzipalbogen. Aunque parece improbable que J. Ribes conociera este método, hemos llevado a cabo el estudio de la bóveda de J. Ribes usando estas herramientas geométricas con objeto de conocer de forma más profunda las consecuencias que plantea el singular diseño de esta bóveda. Los datos así obtenidos han servido para llevar a cabo la construcción de un modelo real de 3 metros de lado en el marco de la asignatura del Taller de Construcción Gótica de la Escuela Superior de Arquitectura de Madrid.[....]

1 ..... 2 ..... 3 ..... 4 ..... 5 ..... 6 ..... 7